El estreno de la nueva Blanca Nieves con Rachel Zegler el pasado 21 de marzo ha sido uno de los más polémicos del año. A pesar de su intención de modernizar el clásico de 1937 con una princesa independiente que no sueña con el amor verdadero, la película generó división entre el público y críticas hacia las actuaciones de Zegler y Gal Gadot. Pero lo que pocos recuerdan es que antes de esta versión, Disney tenía otra idea muy distinta para revivir el cuento.

Rose Red: la hermana olvidada de Blanca Nieves que casi fue protagonista

En 2016, Disney desarrollaba una cinta basada en Rose Red (Rosaroja), un personaje sacado directamente de los cuentos originales de los Hermanos Grimm. A diferencia del clásico animado, esta historia no giraba en torno al príncipe, la manzana ni el espejo, sino en torno al vínculo de dos hermanas y un relato más oscuro y mágico.

En la versión planeada, Rose Red intentaba salvar a Blanca Nieves del hechizo, enfrentando desafíos que habrían dado a la historia un tono de aventura más cercano a una fantasía épica que a un cuento infantil.

Brie Larson pudo ser la heroína del cuento

Uno de los mayores atractivos del proyecto era su posible protagonista: Brie Larson. En ese momento, la actriz ganadora del Óscar sonaba con fuerza para dar vida a Rose Red. El proyecto generó entusiasmo entre los fans por su potencial narrativo y visual, al ofrecer una nueva perspectiva sin reescribir la historia que millones ya conocen.

Sin embargo, la propuesta quedó archivada sin explicación oficial. A medida que Disney priorizó sus remakes de grandes éxitos como La Bella y la Bestia, Aladdin y El Rey León, el enfoque cambió y la historia de Rose Red fue olvidada.

¿Una oportunidad perdida?

Con el revuelo generado por la versión con Rachel Zegler, muchos se preguntan si apostar por Rose Red habría sido una mejor estrategia. La película habría respetado el legado original mientras ofrecía una historia fresca, sin alterar los elementos más queridos del clásico.

Hoy, el nombre de Rose Red representa el «qué pudo haber sido» para Disney: una versión distinta de Blanca Nieves que tal vez habría evitado el debate actual y conectado con una nueva generación de espectadores.