La franquicia de Rápidos y Furiosos ha sobrevivido más de 20 años con escenas cada vez más espectaculares, personajes que regresan de la muerte y misiones que desafían toda lógica. Pero incluso en Universal Studios reconocen que algunos giros fueron demasiado lejos. Durante el Festival Internacional de Cine de Toronto, Donna Langley, presidenta de NBCUniversal Studio Group, ofreció una disculpa pública por una de las decisiones más polémicas: enviar a los protagonistas al espacio en Fast 9.

“Lamento haberlos enviado al espacio. Nunca podremos revertir eso”, dijo la ejecutiva en referencia a la escena en la que Roman (Tyrese Gibson) y Tej (Ludacris) viajaban en un coche modificado hacia la órbita. Aunque la saga ya había mostrado autos saltando entre rascacielos o persecuciones con submarinos nucleares, este episodio fue visto por muchos como el exceso definitivo.

El secreto de la vigencia: adaptarse y escuchar al público

Más allá de ese tropiezo, Langley subrayó que la clave del éxito está en la capacidad de la franquicia de reinventarse. Recordó cómo tras Tokyo Drift (2006), la saga giró hacia el cine de atracos y espionaje con Fast & Furious (2009). “Sabíamos que teníamos que crecer y decidimos llevarla hacia un escenario de atracos internacionales”, explicó.

También destacó el papel de Vin Diesel como vínculo con los fans. “Vin fue pionero en hablar directamente con sus seguidores. Muchas decisiones creativas, como el regreso de Letty (Michelle Rodriguez), se tomaron gracias a la presión del público”, aseguró.

Otro punto clave ha sido la diversidad del elenco, reflejo de la cultura automovilística de Los Ángeles y de comunidades latinas y afroamericanas. Según Langley, esta inclusión nunca fue forzada, sino un rasgo natural del ADN de la saga.

¿Qué sigue para Rápidos y Furiosos?

Universal ya prepara el desenlace. La trilogía final, iniciada con Fast X, culminará en 2027 con una entrega que podría llegar hasta la película número doce. Además, se ha insinuado el regreso digital de Brian O’Conner, personaje del fallecido Paul Walker, con el apoyo de su familia.

Aunque Langley aceptó que no todos los riesgos funcionaron, defendió que la saga se ha mantenido vigente gracias a su flexibilidad y a su conexión con los fans. El reto ahora será equilibrar la espectacularidad con un regreso a los orígenes de las carreras callejeras, fórmula con la que Universal espera despedir a Toretto y compañía en lo más alto de la taquilla mundial.