Un año después del estreno de Joker: Folie à Deux, Lady Gaga finalmente habló sobre el impacto emocional que tuvo en ella la tormenta crítica que acompañó a la película. La actriz y cantante, quien interpretó una nueva y distinta versión de Harley Quinn, reconoció que las reacciones negativas la tomaron por sorpresa y que, aunque al inicio rió por lo absurdo del rechazo, el golpe terminó siendo doloroso.

Un éxito imposible de repetir

Antes de la llegada de Gaga al universo de Arthur Fleck, la primera Joker de Todd Phillips había marcado un antes y un después. En 2019, la interpretación de Joaquin Phoenix conquistó el León de Oro en Venecia, dos premios Óscar y más de mil millones de dólares en taquilla. Su historia —un retrato crudo de la desigualdad, la violencia urbana y el deterioro mental— se convirtió en un fenómeno cultural.

Aquel éxito, sin embargo, cargó sobre la secuela un peso difícil de manejar. Folie à Deux eligió un camino completamente distinto: números musicales, delirio romántico, una estética carcelaria y un tono más teatral. Lo que para Phillips era una apuesta artística, para parte del público fue un quiebre abrupto con la identidad del primer filme.

El resultado fue adverso. La cinta apenas reunió 207 millones de dólares en taquilla global, una cifra mínima comparada con la primera entrega, y fue ignorada por la temporada de premios.

“Me reí, pero fue doloroso”: la reacción de Lady Gaga

En entrevista con Rolling Stone, Gaga recordó la avalancha de críticas con una mezcla de humor y vulnerabilidad:

“Es curioso, casi me da nervios compartir mi reacción. Pero la verdad es que, cuando empezó a pasar, me puse a reír. Porque simplemente el asunto se estaba volviendo totalmente desquiciado. Cuando algo tarda en disiparse puede ser un poco más doloroso. Solo porque pongo mucho de mí en ello.”

Gaga describió la experiencia como emocionalmente compleja. A pesar del ruido mediático, no se arrepiente de haber interpretado una Harley Quinn distinta a la encarnada por Margot Robbie. Para ella, el riesgo formaba parte del desafío creativo.

En cuanto a su futuro dentro de DC, la actriz es consciente de que los planes de James Gunn y Peter Safran no contemplan continuar esta línea narrativa. Folie à Deux, como parte del sello separado Elseworlds, queda como una obra aislada.

La sombra del primer Joker

El mayor obstáculo de la secuela fue vivir bajo la sombra de una película convertida en fenómeno sociocultural. Mientras Joker (2019) había sido descrita como un estudio psicológico cercano al cine de autor, Folie à Deux apostó por la exuberancia, la música y el surrealismo.

La inclusión de Harley Quinn —tratada desde la perspectiva de la psique de Arthur y no como un personaje autónomo— tampoco obtuvo consenso. Algunos celebraron la audacia del enfoque, mientras que otros lo consideraron un desvío incompatible con el realismo del primer filme.

El futuro de Gaga en el cine

Pese a la mala recepción de la secuela, Lady Gaga continúa posicionándose como una actriz con ambición y rango. Tras Nace una estrella, que le dio una nominación al Óscar, y La Casa Gucci, su presencia en Hollywood sigue consolidándose.

Además de sus proyectos musicales, la artista continúa explorando roles dramáticos, biográficos y autorales. Joker: Folie à Deux puede haber sido un tropiezo comercial, pero también confirma su disposición a asumir riesgos creativos donde otros preferirían la comodidad.