La posible adquisición de Warner Bros. Discovery por parte de Netflix reavivó un viejo deseo del fandom de DC: el regreso del SnyderVerse. La combinación de dos movimientos paralelos —la venta casi confirmada de WBD y la actividad reciente de Zack Snyder publicando imágenes de su etapa en DC— detonó nuevamente las interpretaciones que desde 2021 orbitan alrededor del hashtag #RestoreTheSnyderVerse.
Sin embargo, al contrastar el entusiasmo de los fans con la información disponible en medios especializados, el panorama es claro: ni las condiciones corporativas ni la relación actual entre Netflix y Snyder permiten pensar en una resurrección de su universo. Las probabilidades reales no son bajas; son prácticamente nulas.
Si Netflix adquiere Warner Bros. y, por extensión, los derechos cinematográficos de DC, y si Snyder mantiene relación reciente con la plataforma, entonces —en teoría— la compañía podría reactivar el universo truncado tras Zack Snyder’s Justice League.
A esto se sumó otro combustible emocional: Snyder publicó imágenes de sus películas en DC, como una fotografía de Henry Cavill en blanco y negro, lo que algunos interpretaron como un guiño estratégico en pleno proceso de compra.
Aunque ningún medio serio sugirió negociaciones reales, la coincidencia temporal bastó para encender expectativas. De acuerdo con Comic Book, el fandom reactivó peticiones y teorías con la esperanza de que Netflix diera luz verde a una continuación cinematográfica.
Pero la industria no funciona desde el deseo: funciona desde los números.
El factor decisivo: Netflix ya no quiere trabajar con Zack Snyder
El mayor obstáculo para restaurar el SnyderVerse no es legal, ni creativo: es estratégico.
Un reporte de Forbes reveló hace semanas que Netflix abandonó por completo su colaboración con Snyder. Esa conclusión coincide con lo publicado por The Hollywood Reporter en 2024, cuando detalló la salida de Scott Stuber, el ejecutivo que respaldó las superproducciones costosas del director.
Con la llegada de Bela Bajaria como directora de contenidos, Netflix endureció su línea:
– menos riesgos
– presupuestos más bajos
– contenido masivo
– adiós a proyectos de autor excesivamente caros
Y eso golpeó directamente a Snyder.
Los tropiezos que rompieron la relación:
- Army of the Dead: cancelación de planes para secuelas y del anime derivado.
- Rebel Moon: fuertes críticas, poca retención de audiencia y nulidad de impacto pese al enorme presupuesto.
- Cancelación silenciosa del universo multimedia que Snyder había diseñado.
- Detención del desarrollo de Twilight of the Gods y de una película de acción de cien millones de dólares.
- The Last Photograph tuvo que buscar financiamiento fuera de Netflix.
La lectura es inequívoca:
Netflix no financiará nuevos proyectos del director, mucho menos uno que requeriría reconstruir un universo completo, contratar a actores de gran costo, producir efectos digitales masivos y asumir riesgos económicos multimillonarios.
El DCU actual: un proyecto sólido que Netflix no desmantelará
Mientras Netflix marca distancia con Snyder, el nuevo universo de DC avanza con estabilidad bajo James Gunn y Peter Safran.
Bloomberg confirmó que Gunn y Safran renovaron contrato hasta 2027. Ese anuncio, sumado al rendimiento positivo de Superman y a la estrategia de integración entre cine, cómics y videojuegos, posiciona a Gunn como una pieza esencial del futuro de la marca.
David Zaslav elogió públicamente su labor y su visión económica, reforzando la idea de continuidad creativa.
Reemplazar al arquitecto del DCU justo cuando comienza a consolidarse sería un riesgo enorme para cualquier comprador.
Es decir:
– Netflix no comprará Warner para romper un universo recién inaugurado.
– Tampoco invertirá en revivir otro con costos más altos y viabilidad cuestionada.
– Mucho menos recurrirá a un cineasta con quien ya rompió vínculos profesionales.
La restauración del SnyderVerse chocaría de frente con toda la estrategia corporativa.
¿Qué futuro le queda al SnyderVerse?
En términos cinematográficos, ninguno.
El SnyderVerse no tiene cabida en el ecosistema actual de DC ni en la agenda financiera de Netflix.
Sin embargo, algunas posibilidades alternativas sí podrían existir:
- adaptación como novela gráfica
- reinterpretación en animación
- cierre narrativo en publicaciones editoriales
Son formatos que permiten concluir historias sin costos exorbitantes y sin interferir con el DCU.
Lo que no ocurrirá es una restauración en cine. Ese tren se fue, y Hollywood no revive franquicias por nostalgia: las revive cuando son rentables, alineadas con la visión corporativa y respaldadas por relaciones internas sanas.
El SnyderVerse ya no cumple con ninguna de esas condiciones.
Conclusión: nostalgia no es estrategia
Zack Snyder puede compartir fotos de Cavill, Gadot o Affleck, y el público siempre responderá con cariño. Pero la nostalgia no mueve miles de millones ni justifica rehacer un universo que se cerró hace años.
Netflix está en modo eficiencia. DC está en modo reconstrucción. Y la industria exige cohesión total entre visión creativa, presupuesto y retorno medible.
Bajo esos parámetros, el SnyderVerse no renacerá.